Ep. 7: Esto pasó con mi último pedido de ebay

¿Cuánto de tu tiempo inviertes en rastrear tus pedidos y hacer que todo esté a punto?  Hace tiempo recuerdo, revisaba al menos 10 veces al día. En estos días ya no lo hago tanto como solía hacerlo antes.

Sin embargo, algunas cosas ya no funcionan como antes, y lo menciono porque el último paquete que pedí, si bien recuerdan, fueron unos amplificadores RF para celular, y tenía la costumbre de no pasar tiempo haciendo prealerta, si eres seguidor de mi antiguo blog, talvez recuerdes que yo recomendaba no hacerla, bueno, apliqué el mismo principio, y ya no funcionó.

Mi pedido llegó el martes a las bodegas de Laarbox en Doral, y esperé hasta el viernes para poder sentarme en la computadora para hacer la prealerta, y listo, apareció en el sistema.

¿Una manera de educar a los clientes? supongo que sí. Yo mismo he implementado cosas así por el bien del negocio, porque esas cosas que no hacen los clientes, pueden traernos trabajo adicional para mi equipo, y si he aprendido algo en esto, es que a veces pasarnos de buenos, nos hace ver malos cuando dejamos de ayudar tanto a nuestros clientes. Es contradictorio en realidad.

Un ejemplo claro de esto es cuando somos el negocio que abre a las 7 de la mañana y cierra a las 11 de la noche, mi papá solía hacer eso, en algún momento yo también lo hacía, y adoctrinar a los clientes a dejarnos vivir un poco más, o al menos dormir un poco más, seguro nos dará mejores razones para seguir trabajando, ya que tendremos más tiempo para nosotros mismos y nuestros seres amados.

Recuerdo muchos clientes de mi papá reclamaban muy efusivamente cuando llegaban a las 10 de la noche y es más, golpeaban la puerta del negocio para que los atendieran, mi mamá salía abriendo un poco la puerta para avisarles que mi papá no podía atenderlos, mientras él estaba en la cama con un suero intravenoso conectado a su brazo con una aguja.

Nos convertimos en los creadores de nuestra propia cárcel, y si al inicio es irremediable eso, al menos hagamos que nuestra cárcel sea lo más cómoda para nosotros y que esa cárcel se convierta en un lugar placentero y que nos lleve a donde queremos ir mientras estemos allí.

Lección aprendida, compra hecha, compra pre alertada, y aprendamos de esa lección, que nuestros clientes acudan a nosotros bajo nuestras condiciones.

Recuerdo cuando los hermanos Mc. Donald cambiaron el modelo de atención de los restaurantes, por el de la comida rápida. Les tuvieron que enseñar uno por uno que no necesitaban un plato y se especializaron en alimentos que no necesiten cubiertos, muchos tuvieron problemas con eso, pero con mucha compasión y paciencia, le enseñaron uno a uno a como consumir comida rápida y como ya no eran necesarias las mesas para comer. Y es verdad, hubo un momento en el que pensaron cerrar, y la paciencia rindió sus frutos. Lo sabemos bien hoy.

Así que si sientes que en tu negocio hay algo que no funciona bien con tus clientes y que te produce más trabajo del habitual, es hora de hacer un ajuste en tu operación, dale tiempo, enseña con paciencia y cariño, eso puede traerte un dolarito más a tu bolsillo.

¿Tienes alguna operación en tu negocio que podrías mejorar si tu cliente hiciera algo más? comenta abajo